Los Opata de hoy no residen en ninguna reserva ni en México ni en los Estados Unidos de América debido a varios eventos históricos ocurridos durante los últimos 160 años. Hoy en día, muchos descendientes de Opata residen en partes del estado de Sonora y Chihuahua en México y en el sudoeste de los Estados Unidos, particularmente en Arizona, donde nuestros ancestros emigraron para trabajar en la agricultura, la minería, como exploradores, asistentes en las misiones, como personal militar o con el fin de sobrevivir a las acciones inhumanas de los gobiernos de Sonora y México hacia los nativos americanos en la región.